11.1.10

HOMENAJE A JAIME GARZÓN
RASTREANDO LA CARICATURA AUDIOVISUAL (CARICATUMEDIA)


Hace una década –y el pasado 13 de agosto de 2009 se cumplió la fecha fatídica–, Colombia perdió a uno de los más grandes caricaturistas de todos los tiempos, sin que aún se conozca, realmente, como en todos los magnicidios de nuestro país, los verdaderos responsables de su muerte.

Y subrayo que era un caricaturista porque ya demostramos que la palabra caricatura proviene originalmente del italiano caricare, cuyas acepciones son recargar, exagerar. Razón por la cual, en el idioma de Dante, Caricato posee como sinónimos las expresiones pesante, accessivo, esagerato, esasperato, esmaccato, teatrale, affectato, artificioso, forzato, leziooso, maneriato, todas ellas relacionadas de alguna manera con lo recargado, lo exagerado, lo cómico, la caricatura e igualmente relacionadas con el ser y el quehacer de Jaime Garzón.

Mientras que, reapropiando la misma raíz etimológica, en el idioma de Cervantes caricato posee como acepciones principales la de bajo cantante de ópera que hace los papeles de bufo, pero también, actor cómico especializado en la imitación de personajes conocidos; o es reseñado como un americanismo (RAE) que se traduce como caricatura; con las múltiples acepciones que en hispañol[1] posee este polémico término.

La caricatura será entendida, entonces, desde un nuevo paradigma de comprensión, como la objetivación de una voluntad en acción de quien –desde una particular forma de enjuiciar la realidad–, recarga, sintetiza, caracteriza, recompone o exagera una forma, un movimiento o una situación con el propósito de producir reacciones humorísticas en otro significante. Y el caricaturista será aquella persona que, a través de complejos fenómenos intelectuales y emotivos y por distintos medios, propicia el encuentro de sus receptores con diversas fuentes de placer cuando acentúa las gesticulaciones sociales o revela las intenciones de aquellos quienes amenazan valores considerados universalmente válidos, favoreciendo la catarsis y el control social.

Y así como fue posible hablar de caricatura escrita (caricalomía) al referirnos a la obra del genial caricaturista Francisco Quevedo Santibáñez y Villegas, vamos a acercarnos a la caricatura audiovisual (caricatumedia) y sus especiales condiciones de producción a través del homenaje que cuatro de los grandes fisonomistas de Colombia le tributan a Jaime Garzón en la exposición Rastreando Rostros.

Desde el diseño conceptual como nota característica predominante de su propuesta en esta exposición, Elena Ospina nos entrega un Jaime Garzón en el que se acerca al chiste caricatográfico al abrir un compás narrativo. Y aunque el diseño conceptual predomine, también se puede apreciar la síntesis en los elementos eliminados, incluido el rostro que debería sustentar la fisonomía de Garzón. La exageración de la forma como otra de las notas esenciales de la fisonomía caricatográfica se aprecia en los labios y en la dentadura desordenada que caracterizaron al caricaturista homenajeado.

Interesante en esta narración grafica de Elena, tanto el movimiento como el juego de planos y la triplicación del pato que fuera símbolo de programa Quac, El Noticero. Formato televisivo heredado, depurado y mejorado, del provocativo “Zoociedad”, con los que nos hizo carcajear y nos ayudo a releer la realidad política colombiana.




En nuestra lectura, esta clonación no es adjetiva en Elena y subraya la necesaria complicidad en el equipo de producción de la caricatura audiovisual. Porque la caricatumedia escapa al ejercicio creativo del caricaturista oral, escrito o gráfico, que puede hacer su trabajo en solitario.

Por sus condiciones técnicas la caricatumedia tiene como base de producción tres códigos básicos (sonoro, lingüístico y visual), ciertas tecnologías reproductivas que demandan el uso de la energía y unas muy especiales condiciones de participación de un personal especializado en diferentes modos de encodificación de los mensajes y sus intencionalidades.

Esos tres patos símbólicos, entonces, no solo reconocen la necesidad de trabajo en equipo en el quehacer de la caricatura mediática, sino que nos recuerdan, además, los nombres de Eduardo Arias, Karl Troller y Darío Morales, encargados, con el propio Garzón, de incubar los huevos podridos que desde El Noticero lanzaban a los personajes politicos y a las instituciones de una nación que hacía y sigue haciendo aguas, hasta en los más profundos cimientos del Edificio Colombia.



Sólo que gracias a las acciones de las negras aves carroñeras que aún sobrevuelan la realidad colombiana, ya no está Jaime Garzón –y con él su equipo de guionistas–, para señalarlos con el dedo acusador de esa risa que duele, pero que ayuda a hacer catarsis, a estar despiertos y atentos ante los desmanes de los inescrupulosos.


Ya habíamos señalado que, desde su ejercicio de síntesis como nota predominante en su nueva propuesta, Calarcá nos había acercado a uno de los personajes que sirvieron de bisagra a Garzón para comentar los sucesos políticos en los tiempos del “Asalto Social”.


Pero ahora, más allá de evidenciar la extrema síntesis del ojo ciclópeo de la verbosa cocinera de Palacio: Dioselina Tibana, queremos señalar cómo Calarcá inquiere gráficamente en las manos nerviosas de ese personaje preocupado por los “cocinaos” de Palacio. Gesticulación que reafirma otra de las notas características del personaje: su propensión al chisme. Detrás de la fisonomía de Dioselina también es posible reconocer a Garzón, gracias a la exageración de la boca y la dentadura desigual.



Recordar a Dioselina Tibaná es volver a mirar con una tristeza extraña y una sensación de pérdida irrevocable, matizada por la risa, a un hombre que latigó momentos vergonzosos de la historia de colombiana.

Tiempos que no concluyen sino que se prolongan y profundizan, como inimaginable pesadilla, en un proceso de desinstitucionalización y atornillamiento que carcome y desesperanza. La Tibaná, con su mirada urticante, jocosa y critica, nos acerca desde las orillas del recuerdo a ese catálogo de imaginarios inolvidables: Nestor Elí, Godofredo Cínico Caspa, el chafarote del Quemando Central, la periodista gomela, el estereotipado izquierdista John Lenin; narcos, paracos y embajadores gringos; en fin, un sinnúmero de personajes bien concebidos y mejor interpretados que dieron cuenta del ingenio de los caricaturistas audiovisuales; entre los cuales Jaime tenía la voz cantante.



Volver a Dioselina y a toda la polifonía de creaciones caricaturescas de Garzón y su equipo de caricaturistas, es también entender la parodia como un mecanismo de la risa que, en un proceso de circularidad, sale de la cultura y regresa a ella transformándola. Ella explica por qué, en una noche de domingo, no se podía ser el mismo colombiano antes y después de ver a Quac, El noticero, cuando Garzón desnudaba, con gracia inimitable, las verdaderas razones de las gesticulaciones mediáticas.


La exageración como nota predominante vuelve a ser la constante en el ejercicio artístico de Omar Figueroa Turcios. Este fisonomista mundial le brinda condiciones antropomórficas al pato simbólico de Cuac, para dejarnos entera la fisonomía de Garzón con una mano y un dedo acusador que sale de su cola de pato. De esta forma Turcios subraya simbólicamente la condición de Garzón de monstruo enorme, de figura mítica, detrás de la que sobreviven, para la memoria, los personajes Emerson de Francisco o William Garra.

Este hombre–pato, podría formar parte, sin complejo alguno, de la panoplia de quimeras que supieron transmitirnos los griegos en un catálogo inmortal de imaginarios cosmogónicos, o engrosar, con gracia, el grupo de seres que Borges recobró e inmortalizó en su Manual de Zoología Fantástica. Don Jorge Luis, con su sorprendente mirada de asombro y creatividad, y su conocimiento de la Cábala, le hubiera dado vida plena con el nombre, también mítico, de El Gárpato.



En contravía de sus compañeros que encontraron en la risa de Garzón el motivo central de sus exageraciones, síntesis, caracterizaciones y diseños; Orlando Cuellar, O.Cuellar, traslada el fulcro del pesaje al extremo antípoda: la mueca de tristeza. De esta forma, la comedia y la tragedia como representaciones alegóricas del teatro de la vida, en las que Jaime Garzón escanció hasta la saciedad, cobran la totalidad de la significación.

En esa antípoda, encuentra O.Cuellar el planteaminento básico de la representación gráfica: la desolación o el humor desamparado, esa reacción que mueve amargamente las entrañas y produce, en la bilis, el humor negro.

Desde la composición, la línea y el tricolor patrio ya está hecho el planteamiento total. La mínima recarga del gesto de hastío, miedo, asombro y descorazonamiento en la boca de Garzón, es la summa de la caracterización como nota predominante en O.Cuellar.

Y detrás de ese gesto profundo, distinto a los abordajes de Calarcá, Elena y Turcios, que acogieron el gesto cómico para caricaturizarlo, toda las síntesis de la tragedia que vive Colombia. Un gesto que es, a la vez, correlato de su desamparo que no es otro que el desamparo de todos sus compatriotas en una nación donde no prima el Estado de Derecho. Y detrás de la tragedia personal y colectiva, otra recarga que hace recalcitrante la narración: una bandera, con su carga simbólica, que se desenvuelve sin detenerse y sin proteger. Una patria (como concepto adulterado) que no ampara la risa, que falsifica la verdad y tapona el futuro. Y con ella una atmósfera de irrealidad que retrata el desasosiego que vive esa nación que amaba Garzón y que lo inmoló en el ara de la estupidez. Una estupidez que para nada convive con la risa, con la alegría colectiva y el derecho de ser en esta parte del planeta.



Desde la contrariedad de la tragicomedia, estos cuatro artistas de la caricatografía colombiana le rinden un homenaje sentido al más grande de los caricaturistas colombianos. Fisonomías caricatográficas que recuperan para la memoria la valía de este ya histórico personaje que nos dejó en la retina la carcajada igualitaria de Heriberto de la Calle, el arquetipo del filósofo popular con el que era posible identificarse. Un homenaje que tuvo finalmente la comercializada Feria del Libro como escenario rocambolesco y que deja a la Cámara Colombiana del Libro en deuda con aquellos artistas de talla internacional que crearon el Pabellón del Humor en beneficio de los colombianos.

Coletilla: Algún día habrá que hacer, en torno al patrimonio cultural colombiano, una discusión entre lo público y lo privado y averiguar los recursos que la Nación y el Distrito aportan para que unos pocos se enriquezcan.

Carlos Alberto Villegas Uribe

Madrid, agosto de 2009.



Ensayo publicado en la revista Salmón del Diario La Patria de Manizales (Colombia), Revista Artefacto de Perú, Blog Humorgrafe, portugal , Blog Madridmas, España y Revista Latinoamericana de Estudios sobre la Historieta, Cuba, pero enriquecido con las posibilidades del lenguaje propio del blog, para esta publicación (2010) en REIR -Red de Estudios Iberoamericanos Sobre la Risa-


[1] [1] Hemos propuesto la denominación Hispañol para ese lenguaje extenso que, más allá del castellano, integra todas las raíces y expresiones que configuran los territorios hispano e iberoamericanos, a los que no les alcanza sólo la denominación del Español; porque es grande el raudal de términos que le aportó y le sigue aportando América en idiomas como el Quechua, el Aymara, el Guaraní o el Maya; lenguas además vigentes en muchos territorios de América Latina. Así como la presencia y los aportes recibidos desde el Catalán, el Gallego o el Portugués. E incluso desde la configuración de jergas como el Lunfardo, que no son reconocidas por la concepción monárquica que establece la Real Academia en procesos burocráticos que no dan cuenta de una lengua histórica, viva, integradora e incluyente.


[2] http://www.youtube.com/watch?v=xmZipUHND98&feature=related

22.7.08

PROYECTO DE TESIS DOCTORAL
PSICOGÉNESIS DE LA RISA
LA RISA COMO CONSTRUCCIÓNDE CULTURA
1. CONTEXTUALIZACIÓN
La tesis doctoral "Psicogénesis de la risa, la risa como construcción de cultura" se plantea en el marco de desarrollo del programa de la Unión Europea: Becas de Alto Nivel para profesionales de America Latina, para ser desarrollada en el Doctorado La Lengua, La Literatura y su relación con los medios de comunicación, de la Facultad de Ciencias de la Información, en la Universidad Complutense de Madrid.
Sobre el propósito de ALBAN
El principal objetivo de ALBAN es reforzar la cooperación internacional en materia de educación. Las becas son concedidas a profesionales interesados en programas de formación en las Universidades Europeas.
El programa ALBAN considera fundamental que los proyectos propuestos se desarrollen en un marco de movilidad abarcando universidades centros e institutos de formación superior y otras organizaciones, incluyendo empresas interesadas en la formación o actualización profesional superior de sus cuadros.
1.2 La orientación del proyecto
Desde los anteriores lineamientos, se presentó a ALBAN la propuesta de un proyecto de tesis doctoral que tiene como resultado final el diseño curricular de un diplomado iberoamericano en risa y desarrollo humano, avalado por la Doctora Doña Ana María Vigara Tauste, Tutora Académica de la UCM ante Alban.El equipo de evaluación académica de ALBAN consideró significativos los objetivos del proyecto y pertinente el currículo de la profesora, adscrita al Departamento de Filología de la Universidad Complutense de Madrid.La catedrática no sólo ha sido una de las pioneras en España en la investigación de la Lengua, sino, además, una comunicadora que ha abordado con propiedad la indagación del humor y el chiste como medios de comunicación y de expresión humana. Entre sus investigaciones y publicaciones es pertinente señalar:“El chiste oral popular”; “Graffiti, pintadas y hip hop en España”; “Cultura y estilo de los ‘niños bien’: radiografía del lenguaje pijo”; “Sexo, política y subversión. El chiste popular durante el franquismo”; “¡Podréis quitarme todo, menos el miedo...!”; “El humor y su(s) sentido(s) en el acto de la comunicación”; “Estudio del español coloquial: razones para el optimismo”; “Las relaciones de poder en la conversación”, “El chiste y la comunicación lúdica: lenguaje y praxis”.
1.3 Resultados esperados
El proyecto no sólo busca realizar una investigación de corte teórica que consolide un nuevo y contemporáneo paradigma sobre la risa como constructora de cultura, sino que pretende objetivar ese nuevo saber en un diseño curricular, con el propósito de articular pedagógicamente los aportes transdiciplinares de diversos profesionales e instituciones de Colombia y España.
Desde la concepción propia del modelo teórico propuesto para la presente investigación, el diseño curricular se concibe como un instrumento de objetivación semiótica. Medio de comunicación pedagógica que materializa o mediatiza (extiende a otros tiempo-espacio y para otros receptores) la investigación teórica y la correlaciona sistemáticamente para ofrecerle acceso a nuevos receptores.
Este proyecto de formación-investigación favorecerá también la apropiación, intercambio de saberes y formación de profesionales de diversas disciplinas en torno a la risa como constructora de sujeto, de sociedad.
Para lograr este propósito se hará uso de los medios de comunicación de frontera, como el internet para integrar los esfuerzos interdisciplinarios por comprender la risa, no sólo como fenómeno o expresión humana, sino también como herramienta antropológica para la construcción de ser humano y de sociedad
1.4 Proyecto elegido por ALBAN
Después de un detallado proceso de evaluación técnico científico realizado por los expertos de ALBAN, el proyecto de Formación-investigación Psicogénesis de la Risa, la risa como constructora de cultura, fue selecionado entre las 3.900 propuestas presentadas por los profesionales de las Universidades Latinoamericanas, para ser desarollado en la Universidad Complutense de Madrid, en la Facultad de Ciencias de la Informaciòn, Doctorado La Lengua, la Literatura y su relación con los medios.
1.5 Objetivos del proyecto
Desarrollar una teoría de la risa, revisando y replanteando los autores antiguos, clásicos y contemporáneos para comprenderla como un entramado biológico, psicológico, neurológico y cultural mediante el cual se favorece la construcción de ser humano y de sociedad.
Desarrollar –a partir del abordaje de las investigaciones contemporáneas sobre la risa- un diseño curricular en Comunicación, Risa y Desarrollo humano como proyecto práctico (entendido el diseño curricular como un medio de comunicación pedagógica que objetiva saberes y visiones de mundo, al igual que permite aunar esfuerzos en el logro colectivo de propósitos socioculturales).
Difundir entre los profesionales de distintas disciplinas del saber (comunicación, neurociencia, psicología, sociología, antropología, filosofía) la comprensión de complejidad que representa esta expresión y su provecho en beneficio del desarrollo humano y social de los países iberoamericanos.
Fortalecer la Red de Estudios Iberoamericano sobre la Risa -REIR- haciendo uso de los medios de comunicación de frontera para convertirla en un motivador y generador de líneas de investigación entre las disciplinas.
2. CONCEPTUALIZACIÓN
Para evidenciar la pertinencia de la propuesta de investigación teórica en el contexto del Doctorado La Lengua, La Literatura y su Relación con los medios de comunicación, evidenciaré a continuación el marco de comprensión y el modelo de indagación desde el que se afronta la presente propuesta
2.1 Marco de comprensión
2.1.1 Medios extendidos, medios entendidos.
Para comenzar afirmaré la concepción de medios de comunicación que orientará los procesos de indagación. La propuesta teórica de Psicogénesis de la risa: la risa como construcción de cultura, será abordada desde la semiótica y en especial desde la perspectiva del teórico canadiense Marshall McLuhan, escritor y pensador, nacido en Edmonton, que revolucionó la comprensión de los medios de comunicación y su inserción en la vida de los seres humanos en la década de los setenta.
Teórico de la comunicación poco ortodoxo, McLuhan propone la comprensión de los medios como objetivación del pensamiento humano y como extensión de los sentidos en el proceso de apropiación, divulgación y construcción de realidad.
Desde su perspectiva, todo medio es una tecnología y como tal, la relación con cualquier tecnología redefine y estructura los patrones de interdependencia en los aspectos de la vida personal y social. “El medio es el mensaje” título de uno de sus libros, es quizas una de la frases más divulgadas. Repetida incluso en ámbitos extraños al de los propios comunicadores, que si bien da cuenta sintética de la revolucionaria mirada de McLuhan corre el peligro de caer en el reduccionismo y la banalización.
Para McLuhan, una cámara fotográfica o de televisión son las extensiones de los ojos del ser humano y una grabación de audio es igualmente una extensión de su voz. Cambio de paradigma conceptual que le sirvió para plantear el concepto de la Aldea Global en un mundo donde el INTERNET todavía no era una realidad fáctica.
Mirada visionaria sobre los medios como extensiones, promovida inicialmente desde los campus canadienses en la década de lo setenta. Formulación audaz que dió lugar a una novedosa comprensión de las formas mediadas de comunicación. Mirada y apuesta teórica del entonces “gurú” que prefiguraba las complejas relaciones, metacomprensiones, modos y modelos de comunicación de la actualmente denominada globalización. De esta forma, McLuhan rompía con la primacía teórica de los estadounidenses, quienes durante muchos años comprendieron e impulsaron la reflexión teórica de los medios de comunicación desde la excluyente visión de Mass Media.
El profesor de Manitoba y de Cambrige le abría a otras disciplinas, como el diseño curricular, por ejemplo, campos originales antes no concebidos para la apropiación de las tecnologías comunicativas. McLuhan descubrió el átomo de la comunicación y realizó con él la fisión nuclear necesaria para que la complejidad disciplinar construyera vasos comunicantes entre los diversos objetos y líneas de investigación. Una explosión de posibilidades comunicativas que incluso hoy no termina de extenderse. Las aplicaciones de sus conceptos dieron origen a proyectos como la universidad a distancia, donde se pudo comprender y hablar de la enseñanza mediada como extensión de los saberes del profesor.
La comprensión de McLuhan de los medios como extensiones de los sentidos humanos permitió saltar el cerco que la información le había tendido a los medios de comunicación encasillándolos en la excluyente concepción de Mass Media. Sus tesis, materializadas en el libro "Understanding Media: The Extensions of Man" auparon la ampliación de los ámbitos de comunicación del restringido dominio del periodismo al extenso y cada vez más complejo dominio de la comunicación social. (Si quiere ver el video le recordamos utilizar la flecha de retroceso que aparece en la parte superior de la ventana de Youtube, para regresar a este blog) VER VIDEO
Desde entonces hablar de medios de comunicación no es solamente hablar de medios masivos de comunicación sino de universos simbólicos objetivados que trascienden la persona, haciendo uso de los lenguajes –y no sólo de la lengua- como tecnologías escriturales concretas (códigos) que mediatizan la comunicación humana. Los medios son entonces todo tipo de instrumentos que extienden los sentidos y construyen espacios-tiempos diferentes al aquí y el ahora transformando el mundo de la vida ("Lebeswelt" desde la perspectiva de Husserl).
Esta es la primera perspectiva disciplinaria o ámbito de metacomprensión que valida una investigación de corte teórico sobre la risa en un Doctorado dedicado a desarrollar líneas de investigación en torno a la Lengua, la Literatura y los medios de comunicación. Una interesante revisión y reactualización de las leyes McLuhianas, nos la brinda Alejandro Gustavo Piscitelli; Profesor Titular del Taller de Procesamiento de Datos, Telemática e Informática. Carrera de Ciencias de la Comunicación, Facultad de Ciencias Sociales, de la Universidad de Buenos Aires en el siguiente documento de su aula virtual:
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2.1.2 Semiótica y risa, sustento comprehensivo de la comunicación y la cultura
En el proceso de consolidación de una teoría general de la risa desde la comunicación y la cultura, realizaremos una mirada paralela a la semiótica, redescubierta y potenciada por los esfuerzos comprehensivos de Umberto Eco. En la misma “década Macluhiana” el teórico italiano recogía y realizaba los deslindes de la lingüística anticipados por Ferdinand de Seasurre y por Charles Sander Peirce para consolidar a la semiótica como instrumento de la ciencia. Desde su Teoría de los códigos y Teoría de la producción de signos, Eco (1973) instauraba un programa comprehensivo de la comunicación y la cultura a través del Tratado de Semiótica General.
En nuestro caso, una reapropiación y una crítica a este trabajo le brindará a la mirada transdiciplinar de la risa el sustento necesario para comprender desde los ámbitos propios de la comunicación y la cultura, una serie de esfuerzos de la academia que avanza desde distintos frentes en la consolidación de un dominio de intereses del pensamiento, la reflexión y la ciencia. Interés creciente por comprender la risa como fenómeno humano de una gran complejidad y promover sus aplicaciones en la conquista de mayores estados de bienestar. Dominio que le restituye a la felicidad el sentido teleológico del esfuerzo humano sin la promesa de cielos inexistentes, ni de paraísos de cucaña; como lo expresara el filósofo colombiano Estanislao Zuleta en su ensayo El elogio de la dificultad.
Como lo propone el propio Eco:
“No se puede hacer investigación teórica sin tener el valor de proponer una teoría y por consiguiente, un modelo elemental que guíe la exposición posterior. No obstante cualquier investigación teórica debe tener el valor de especificar sus propias contradicciones, volviéndolas explicitas en los casos en que no se releven a primera vista”.
Siguiendo a Eco, proponemos un modelo de indagación que pretende ser comprensivo de la multiplicidad de formas y disciplinas desde las cuales la academia aborda actualmente el estudio y apropiación de la risa en su concepción amplia. Modelo que pretendemos, como lo aconseja el académico italiano, impugnar constantemente revisando y redefiniendo, allí donde se considere necesario, las definiciones, concepciones y paradigmas existentes, con el propósito de integrar un nuevo paradigma que ampare en un dominio sólido, los distintos esfuerzos comprensivos de la risa.2.1.3 Acotaciones sobre la risa como fenómeno extenso.
En nuestro contexto, la risa no tiene como referente exclusivo la reacción biológica de los humanos a momentos y situaciones de humor; respuestas comportamentales que pasan, en su tono y duración, por la sonrisa, la risita nerviosa, el caquino, la carcajada, la risotada, el cascabeleo y el hipido. Aunque no podemos negar que estas expresiones comportamentales nos interesan semióticamente como sistema de significación de procesos internos. Sin embargo, suscita para nosotros un mayor interés la comprensión de la risa como un fenómeno humano que se extiende del sujeto a la sociedad como suma de intersubjetividades y a las objetivaciones semióticas de ambos como mediaciones que dan cuenta de su razón de tecnoespecie.
Desde esta perspectiva integradora, nos interesan las investigaciones (metacomprensiones) que sobre ella han construido disciplinas del saber como la filosofía, la semiótica, la literatura, la psicología, la neurobiología, las ciencias cognitivas y la comunicación.
Nos interesa también indagar la posibilidad de articular estas metacomprensiones bajo una disciplina que puede convertirse a futuro en un dominio propio con desarrollo de líneas de investigación integradas.
La risa será entendida en este trabajo de investigación como un entramado neurológico, biológico, psicológico, y cultural que posibilita la reacción fisiológica a situaciones de humor y de placer del entorno, mediante el cual el ser humano logra, tanto, niveles significativos de desarrollo individual, como construcción social de la realidad a través de un ejercicio cognitivo emocional de orden superior de los individuos de nuestra especie.
No atenderemos en nuestra indagación exclusivamente a la risa como las múltiples respuestas fisiológicas arriba mencionadas. Extenderemos su marco de interpretación a una explicación comprehensiva de los procesos neuronales que la facilitan, a los procesos biológicos que favorecen la homeóstasis y el equilibrio de las células y de todo el sistema orgánico, a las interacciones lingüísticas que la suscitan; todas ellas como posibilitadoras de desarrollo de las estructuras internas del sujeto.
Interesa en este marco de comprensión desde la comunicación, las mediaciones (objetivaciones semióticas) que la propician volitivamente desde diversos lenguajes de la risa (caricatura). Pero sobre todo nos interesa su comprensión como constructora de sociedad dentro de una especie complejamente ritualizada.
En conclusión, a este trabajo de indagación teórico le interesa la risa, entendida más allá de una respuesta comportamental, como un fenómeno humano dinamizador de tres ámbitos: el personal, el social y el creativo (o de objetivación semiótica) que tiene como fin último un mayor bienestar de la especie.
2.2 MODELO GENERAL DE INDAGACIÓN
Para comprender la totalidad del proyecto y la plena articulación de la tesis: "Psicogénesis de la risa, la risa como construcción de cultura" con el Doctorado La Lengua, La Literatura y su relación con los medios de comunicación de la Facultad de Ciencias de la Información, comentaré y desarrollaré el anterior modelo de indagación que servirá de punto de partida de la Tesina y de la Tesis Doctoral.
2.2.1 Sistema circular de la risa
En el modelo se proponen gráficamente los tres ámbitos que nos interesa abordar: Sujeto, Sociedad y Objetivaciones semióticas (los medios como extensión de los sentidos humanos que lo trascienden en el aquí el ahora). Los círculos que los representan no sólo se superponen sino que se traslapan e interceptan evidenciando la imposibilidad de definir límites estrictos entre los tres; sugiriendo, por el contrario, la riqueza y complejidad de su interacción.
En este modelo proponemos la risa como un factor humano dinámico. Su dinamismo se entiende por su presencia reflexiva en los tres ámbitos (se da en cada uno de ellos y regresa a ellos transformándolos). La risa es personal y social y se puede hacer uso de la lengua (comunicación humana) o de objetivaciones semióticas (medios) para suscitarla y comprenderla.
2.2.2. AMBITO DEL SUJETO, Risa, Lengua y subjetividad
Contrario a la que suele creerse, la risa ha sido una de las preocupaciones del conocimiento a lo largo de la historia de la humanidad. En el libro «Una historia cultural del humor» que reúne las diversas ponencias de notables historiadores mundiales, en Amsterdam en 1994, en torno al humor, la risa y la sonrisa, Jacques Le Goff señala que desde épocas inmemoriales, el hombre se ha preocupado por entender la risa como códigos culturales que se traducen a sus propias lenguas.”Me parece que la distinción básica que establece el Antiguo Testamento prevaleció durante mucho tiempo, aunque bajo formas renovadas, a saber, la distinción entre dos tipos de risa, que la lengua hebrea define con dos palabras muy distintas. La primera es sakhaq, «risa feliz, desenfrenada» y la otra es laag, «risa burlona, denigrante». La primera palabra interesa también a los medievalistas, ya que su legado perdura durante la Edad Media. Este término dio nombre a uno de los principales personajes del Antiguo Testamento, Isaac, cuyo nombre significa «risa». ( ...) Existe, a mi juicio, algo más que una simple continuidad conceptual de estas dos formas de risa y me parece que las sociedades cristianas del pasado se resistieron a creer que eran una misma y sola cosa. Sin embargo, el latín les obligó a confundirlas. El griego tiene dos palabras con la misma raíz, gélan y Katagélan: la primera es la risa natural; la segunda, la risa maliciosa. Los esfuerzos del pensamiento medieval por distinguir la risa buena de la mala simplemente siguen, a mi entender, la diferencia existente entre las dos palabras griegas. El latín disponía de la palabra risus. El griego también tenía una palabra para sonrisa, el latín tuvo que construir su equivalente: subrisus, cuyo uso se acabó difundiendo aunque no sin dificultades; durante mucho tiempo subrisus no significó «sonreír» sino «reírse para sus adentros» o «risa secreta». Se convirtió en «sonrisa» cuando cambiaron los valores y comportamientos (quizá en el siglo XII). Cabe pensar que la sonrisa fue una de las creaciones de la Edad Media.”
Esta diferencia semántica sobre la risa y su denominación la traducimos contemporáneamente, en términos de la pragmática social como “reirse con” y “reirse de” con todas las cargas morales y éticas que estas denominaciones conllevan. Sin embargo, es necesario subrayar que por antiguos y sencillos que parezcan los términos señalados por Le Goff, -que de alguna manera establecen una primera taxonomía pragmática de la risa- ellos corresponden a estadios muy evolucionados de la especie humana en el desarrollo del lenguaje. Un desarrollo lingüístico que constituye ya una estructura representacional altamente compleja como instrumento de la especie para propiciar la convivencia social, sancionando, asimilando o liberando a los sujetos que interactuan en ella.
En las palabras hebreas, griegas y latinas, rehabilitadas por Le Goff, existe, de forma implícita, una concepción de la función social de la risa, así no se hubiese desarrollado aún metacomprensiones para explicarla.
Para quienes intentamos comprender el fenómeno de la risa nos interesa adentrarnos mucho más en la historia de la humanidad para entender cómo llegamos a desarrollar esta capacidad, hasta hace muy pocos años considerada como exclusiva de nuestra especie.
Un reciente artículo del investigador Jaak Pankseep, profesor de la Universidad de Bowling Green State de Ohaio, en los Estados Unidos, sugiere que los circuitos neurológicos para la risa existen en partes antiguas de nuestro cerebro, cuya estructura general es compartida con muchos animales VER VÍDEO
Sin embargo, propuestas teóricas como la de Teresa Bejarano "La Risa y los distintos niveles de interpersonalidad" recalcan la exclusividad humana de la risa en tanto que los humanos hemos desarrollado niveles de conciencia (y de objetivación y manipulación de esa conciencia) que no se registran en otras especies. Estructura mental que supera la expectativa de bajo nivel (nivel animal) adecuada sólo para la rápida adaptación al mundo. A ese énfasis de tipo antropológico, añadiremos el nivel de complejidad que hace de la nuestra una verdadera tecnoespecie. Una sociedad con capacidad extraordinaria en el uso de medios como extensiones humanas, que se incrementan y responden a las necesidades crecientes de comodidad y bienestar.
Y si bien, como parece demostrarlo el etólogo Jaak Pankseep, compartimos zonas neuronales con otros animales craneados a los que se les atribuyen, ahora, expresiones de risa (como las ratas y los perros) lo cierto es, por el momento, que a ninguna especie distinta a la humana se le reconoce la posibilidad de juegos lingüísticos (la lengua) ni de objetivaciones semióticas (mediaciones) con el propósito de hacer reír a un congénere: la caricatura; entendida ésta en “latu sensu” desde un nuevo paradigma de interpretación.En la conciencia de la capacidad humana para crear y objetivar estructuras de representación de la realidad que suscitan la risa y le brindan al ser humano la posibilidad de ser un ente reflexivo, se afincara el estudio de la risa como fenómeno comunicación.
En el ámbito de la persona, la Lengua tendrá un lugar privilegiado y las investigaciones de Sigmund Freud sobre el chiste y su relación con el inconsciente, las de Alfred Stern y su texto: Filosofía de la Risa y el llanto, el clasico aporte del filósofo francés Henry Bergson con su obra angular: La risa y las nuevas metacomprensiones de Ana María Vigara Tauste en torno al Chiste Lúdico. Obras, pensadores e investigadores que alimentarán la discusión, redefinición y consolidación de una propuesta taxonómica en torno a las objetivaciones simbólicas que buscan suscitar la risa en su amplio espectro.
Trataremos de demostrar que el humor y lo humorístico pertenecen primordialmente al ámbito de la persona y la caricatura primordialmente al ámbito de las objetivaciones semióticas. Mientras los cómico pertenece primordialmente al ámbito de los social: espacio donde se negocián sentidos de realidad.
Reiteramos la palabra primordial, porque ha de recordarse que en la presentación del modelo insistimos que los ámbitos se traslapan y superponen imbricando sus límites.
Para proponer una nueva taxonomía y terminología que dé propiedad al lenguaje con el que se comprende la risa, vamos a indagar y, hasta donde sea necesario precisar los terminos históricos con los que se ha entendido la risa, sus vehiculos, sus manifestaciones y su función social.
A partir de este ejercicio de realinderamiento propondremos un nuevo paradigma en el que se establezca una taxonomía consistente. Taxonomía que tiene como fundamento las notas características y las condiciones de producción de la risa: las fuentes del placer que la originan, los mecanismos subjetivos y sociales que la propician y los medios que facilitan su circulación y disfrute.Es necesario enfatizar que la risa no sólo NO estuvo presente en el antropoide bípedo que inició la línea de ascenso hacia el homo faber y al homo sapiens sapiens, sino que su desarrollo, en un proceso de miles de millones de años de incrementos positivos, favoreció la aparición de una doble estructura mental -como lo propone Teresa Bejarano Fernández, profesora de la Universidad de Sevilla-. Estructura que facilita la comprensión de la interioridad propia y ajena y la construcción de una cultura intersubjetiva necesaria para su desarrollo como especie. De allí que nos interese conocer con mayor propiedad la propuesta de la académica sevillana.El atributo de humanidad en la especie no es posible sin la sociedad que la humaniza. Así lo ha demostrado el hallazgo de niños ferales que, privados del contacto humano, no han podido desarrollar el lenguaje ni las habilidades sociales que los habilitan para convivir y ser competente en los escenarios de una especie complejamente simbólica y mediatizada. Pero igualmente la cultura (organización símbólica de la sociedad) no podría llegar a adquirir la dimensión planetaria que ahora cobija al hombre en una complejidad cada vez más creciente; si ella misma no tuviera la capacidad ontogenética y filogénetica para transmitir sus logros esenciales. Y la risa es uno de esos logros conquistados por la evolución de la especie y posibilitadora a su vez de nuevos logros y conquistas.Para comprobar estas hipótesis y explicarlas desde la perspectiva de la neurociencia, revisaremos y discutiremos en la teoria de Rodolfo LLinás, autor de el libro “El cerebro y el mito del yo”, elementos significativos para comprender el largo proceso de adaptación humana. Así mismo, buscaremos líneas de comprensión en su teoria de "patrones de acción fija" lineamientos para entender este fenómeno esencial del desarrollo humano al que Llinás dedica muy pocas líneas.
2.2.3 ÁMBITO DEL SUJETO: Sujeto y homeóstasis biológica.
La risa con sus funciones de homeóstasis biológica y de adaptación social es vital en el desarrollo de la tecnoespecie. Sin embargo, poco, o mal, se pueden comprender las funciones que están a la base de su razón teleológica (el bienestar de los seres humanos) sino no se da cuenta de su fisiología y sus efectos biológicos.
Recientes investigaciones de neurociencia han demostrado que "la risa es el resultado de la exposición a un acontecimiento incongruente que es captado por receptores y transmitido por los neurotransmisores hasta llegar a las neuronas. Éstas ante la imposibilidad encontrar una estructura de referencia donde situar la escena – o sólo consiguiéndola imperfectamente- desencadenan descargas electrofísicas hacia el hipotálamo (ésta área del cerebro, unida al sistema límbico, que proporciona la base biológica de nuestros estados emocionales y rítmos diversos del organismo) por lo cual se generan una serie de descargas moleculares que chocan contra las células nerviosas del diafragma produciendo movimientos convulsivos" que varían de intensidad desde la sonrisa al hipido.
Como lo señala Daldo Hernando Mesa en su artículo: “Fisiología de la risa”, la investigación científica ha demostrado que reír reduce la tensión arterial, disminuye las hormonas generadas por el estrés, incrementa la flexión muscular, produce un masaje natural a los pulmones y los órganos del vientre, generando a su vez sensación de bienestar. Además, el hecho físico de reír de manera no fingida, eleva la celulas T, incrementan las proteínas, con lo cual se activan las funciones inmunes y se eleva la capacidad del organismo de luchar contra mucha clase de infecciones, inclusive con aquellas denominadas Gama-interferon, así como las células B, productoras de anticuerpos. Según Mesa, el incremento de Inmunoglobulina a (Iga), así como el aumento de endorfinas y serotonina, después de una sesión de risa no fingida, ha demostrado su capacidad para fortalecer el sistema inmune de los pacientes sometidos a investigación.
La popularización de estos resultados ha dado paso a una rama de la medicina conocida como Risoterapia o gelosterapia. Una aplicación práctica de los saberes contemporáneos en torno a la risa, apropiado en el campo de la salud, pero que a nosotros nos interesa abordar crítica y propositivamente para construir con dimensión integral una Teoria General de la Risa que conduzca finalmente al diseño curricular en Comunicación, Risa y Desarrollo Humano.
2.2.4 ÁMBITO DEL SUJETO: El sujeto y el mundo de la vida, repensar la risa y la subjetividad
El mundo de la vida, concebido desde Husserl como horizonte vital del sujeto, deja de ser un mundo inmediato para convertirse, como consecuencia de la creciente presencia de los medios en la vida de la tecno-especie, en mundo mediado –mediato-, con todas las implicaciones filosóficas, antropológicas, históricas, y socioculturales que ello conlleva.En el complejo entramado de sujeto, medios, mediación, tecno-especie y mundo de la vida, nos interesa revisar la tesis doctoral de Ricardo Acebes Jiménez: "Subjetividad y mundo de la vida en Husserl y Merlau Ponty: Historia Cuerpo y Cultura", presentada en la Universidad Complutense de Madrid en 1995 en la medida en que el autor podría arrojar comprensiones epistemológicas respecto a las complejas relaciones de la risa, las mediaciones y el mundo de la vida (ambito del sujeto en nuestro Modelo General de Indagación). Cómo lo señala el resumen de la citada obra: “La tesis presentada bajo este titulo analiza las relaciones entre la noción de subjetividad y el concepto de "mundo de la vida", a partir del estudio de la obra filosófica de Edmund Husserl y Maurice Merleau-Ponty. La investigación se centra, para ello, especialmente en los siguientes títulos: la crisis de las ciencias europeas y la fenomenología transcendental de Husserl, y fenomenología de la percepción y lo visible y lo invisible de Merleau-Ponty. En ella se examinan, por una parte, las implicaciones de la revisión de ambos autores del concepto de sujeto presente en corrientes de pensamiento influyentes desde el principio de la edad moderna. Por otra parte, el concepto de mundo de la vida conduce a un planteamiento de la subjetividad que presta atención a las condiciones corporal, histórica, cultural, afectiva y expresiva del ser humano, y muestra así la implicación de los sujetos en su mundo, a partir de dimensiones y estructuras especificas”
Desde el ambito personal es importante, también, entender la risa como un factor resiliente, desarrollado antropológicamente (sujeto-sociedad) en un largo proceso de evolución, que permite la asimilación de realidad y la acomodación de estructuras psíquicas para el logro de mayores niveles de desarrollo humano. Un factor universal, social e intrapsíquico de la especie que ha potenciado la evolución humana y coadyuvado el enfrentamiento de situaciones adversas a lo largo de su historia hasta convertirlo en un ser que ha conquistado lenta y progresivamente niveles superiores de pensamiento y de consciencia.
2.2.5 ÁMBITO SOCIAL: Sociedad, socialización y cultura.
La sociedad es el escenario por excelencia de la risa. «Para comprender la risa -nos recordará Bergson-, hay que integrarla a su medio natural, que es la sociedad, hay que determinar ante toda su función útil, que es una función social. Esta será, digámoslo, la idea que ha de presidir todas nuestras investigaciones. La risa debe responder a ciertas exigencias de la vida común. La risa debe tener una significación social» (Bergson, 1973).
La risa es, entonces, en esencia, un acto de comunicación que amerita ser entendido y aplicado a las circunstancias del mundo de la vida.
Nadie ríe sólo y cuando esto sucede, quien lo hace no puede realizarlo más allá de un universo simbólico socializado, que reafirma o deconstruye como evaluaciones contrastantes de la realidad subjetiva socialmente construida.
Desde esta perspectiva nos interesa indagar y apropiar la teoría sociológica de Peter Berger y Thomas Luckmann para comprender ¿cómo es posible que los significados subjetivos se vuelvan facticidades objetivas? Cómo esas fácticidades objetivas que consideramos realidad, se contrastan permanente para afianzarla o para morigerar los efectos “traumáticos” a través de la risa. Nos interesa profundizar en la teoría sociológica de Berger y Luckmann para apropiar sus instrumentos de comprensión.
Esta teoría sociológica propone que los universos simbólicos cumplen funciones nómicas, ordenadoras y de negociación que facilitan la integración de los significados discrepantes dentro de la vida cotidiana en la sociedad.
Queremos indagar en esta teoría la posibilidad de proponer la risa como un factor de negociación de significados discrepantes que morigera y facilita la vida en sociedad. Un factor que no sólo hace parte del universo de comprensiones de lo social sino que además la caracterizan. Como parece demostrarlo la Tesis en Proceso de Alejandro Romero en la Universidad de Córdoba, diversas sociedades (premoderna, moderna y postmoderna) entienden y apropian la risa de muy distintas maneras. Apoyado en Lipovestky Romero afirma que la nuestra es una sociedad humorística:
"Desde el principio, Lipovetsky afirma, con ese entusiasmo monocromo que embarga a todos los que alguna vez han creído encontrar una clave esencial para comprender el mundo, que la sociedad contemporánea puede ser definida como fundamentalmente humorística, que el humor es un componente de máxima importancia en dicha sociedad:«... el fenómeno no puede circunscribirse ya a la producción expresa de los signos humorísticos, aunque sea al nivel de una producción de masa; el fenómeno designa simultáneamente el devenir ineluctable de todos nuestros significados y valores, desde el sexo al prójimo, desde la cultura hasta lo político, queramos o no. La ausencia de fe posmoderna, el neo-nihilismo que se va configurando no es atea (sic) ni mortífera, se ha vuelto humoristica» (Lipovetsky, 1986: 136-137).Por de pronto encontramos ecos de Nietzsche y su Zaratustra; volvemos a escuchar el derrumbarse de la razón como último gran objeto de fe, en tanto la fe religiosa está sencillamente fuera de consideración (“la ausencia de fe postmoderna no es atea”). La incredulidad de nuestros tiempos, ese estar de vuelta de todo que supone desesperar de la capacidad humana para influir en la solución de los problemas de la especie (ya sea rezando y obedeciendo los mandamientos del Creador, ya sea valiéndose de las armas de la razón, analizando situaciones, diagnosticando errores y planificando vías de acción), y que lo impregna todo hasta el punto de ser característica sustantiva de la cultura contemporánea, favorece antes una expresión humorística que el despliegue de dramatismo desesperado.
El humor ha existido siempre, naturalmente, bajo una forma u otra, pero es únicamente en la sociedad occidental contemporánea que toma constante posición de primera fila. En el pasado, lo humorístico hacía acto de presencia en momentos aislados, ocupaba su nicho específico, mayor o menor según los particulares empíricos de cada caso, en el espacio y el tiempo. Ahora, de la misma forma que el proceso de des-diferenciación cuya importancia privilegia Lash (1990) supone la omnipresencia de la cultura, el humor impregna muchos ámbitos de lo social que antes le estaban vedados”
Nos interesa entonces entender la articulación subjetiva, social y mediática de las sociedades, incluyendo la risa y su función social como un factor que ayuda a caracterizarlas. Para ello, no sólo será importante revisar a Romero, Lopovestky, sino tambien a Michel Foucault quien en “Las palabras y las cosas” brinda los elementos teóricos para definir la premodernidad, la modernidad, y la postmodernidad como formas simbólicas y modos de uso de habitar y relacionarse con la realidad; así como a Marshall Bergman, en su obra: "Todo lo sólido desvanece en el aire".
2.2.5 ÁMBITO DE LAS OBJETIVACIONES SEMIÓTICAS
Los objetos son extensiones de los seres humanos y materialización de sus pensamientos. En tanto extensiones y materializaciones simbólicas se pueden considerar medios de expresión, medios de comunicación e instrumentos de intervención del mundo de la vida.Nos interesa indagar en las muestras que Youtube ofrece cuales son las posibles categorías de las objetivaciones semióticas.
Hasta el momento el modelo general ha planteado dos tipos de objetivaciones: las objetivaciones semióticas que desde una voluntad de acción intenta hace reir al otro utilizando distintos medios expresivos (cada uno de ellos regidos por códigos específicos).
Y del otro las metacomprensiones de la risa como un fenómeno humano, que se objetiva en distintos medios: impreso, sonoro, audivisual.
La inclusión del video inicial donde un presentador acusa un ataque de risa, nos refiere ya otra categoria de objetivaciones: el registro cómico. Una objetivación donde no existe una voluntad en acción de hacer reir al receptor. En este caso la captura una situción humorística (del ámbito personal) gracias a un tecnología que cada vez está alcance de mayor cantidad de emisores provoca la risa. La cámara de video como el extensión del ojo del ser humano comporta nuevos cambios en la percepción de la aldea global, para seguir a McLuhan.
A esta tecnología se suman los desarrollos de la cibernética y el internet. Youtube, como escenario de circulación de objetivaciones semióticas y como negociación de imaginarios del mundo de la vida, es otro aspecto interesante para ser abordado. Una categoría, repito, que el modelo inicial no había concebido.
Categoría que emerge con fuerza en el momento de objetivar en este medio de presentación el borrador del proyecto de tesis. Pero que confirma la intención de confrontación permanente que el modelo enunciado requiere, hasta lograr una mayor consolidación como paradigma de lectura e interpretación de la risa como construción de sujeto y sociedad.
2.2.6 OBJETIVACIONES SEMIÓTICAS: el nuevo paradigma de la caricatura.
Por una parte, se entiende la caricatura como la objetivación semiótica de una persona que, en clara voluntad de acción, hace uso de códigos o sistemas de significación (lenguajes y mecanismos subjetivos) y medios expresivos (escritos, visuales, sonoros, audiovisuales, tridimensionales) para recargar la realidad con el propósito de hacer reír a los otros. La expresión de McLuhan “avanzamos al futuro mirando por el espejo retrovisor” animara nuestra indagación, en el sentido, de que no es posible entender las objetivaciones semóticas de la risa con los paradigmas del siglo XVIII. Para entenderlas a cabalidad en su dimensión individual, social y creativa, es necesario revisar los conceptos con la cuales definimos y nombramos actualmente estos medios de expresión de la risa. Conceptos que deben responder a las metacomprensiones actuales de la teoría y de la ciencia.
No podemos seguir hablando de caricatura desde su estricto sentido medieval: dibujo recargado del rostro humano. Es significativo que los propios concursos y festivales de caricatura -eventos contemporáneos- convocan a sus participantes con connotaciones de caricatura con un sentido extendido "Latu Sensu". De hecho la critica literaria ya hace mucho tiempo utiliza el término de una forma extendida. En 1943 el mexicano Alfonso Reyes afirmaba: "Borges ha escrito ya una buena docena de libros entre versos y prosa. En el verso huye de lo que le llama la manía exclamativa o la poesía de interjección, y en la prosa, cuando opera con su propio estilo, sin caricatura costumbrista, huye de la frase hecha". Por su parte, Raimundo Lida al analizar al mismo autor manifiesta respecto a su prosa: "Borges desarma al crítico, se la adelanta, lo invalida por anticipado con esas caricaturas de disquisición retórica que sus relatos ponen en boca de ciertos verbosos personajes". Y para ir un poco más lejos, en el sentido lato de la caricatura como expresión que designa lo risible, recordemos que la opera bufa, ya denominaba "caricato" al cantante Tenor encargado de los papeles cómicos. Creemos que las objetivaciones semióticas de la risa, deben denominarse, desde la perspectiva del mundo contemporáneo con el genérico de caricatura, entendida en sentido lato y abarcador. Cada lenguaje y medio expresivo que posibilita la objetivación de una voluntad de acción de un creador que quiere que otro ría demanda una resignificación y una denominación comprensiva. En este sentido, esta tesis doctoral propone reinterpretar la risa y sus objetivaciones semioticas, desde paradigmas actuales. Los conceptos del siglo XVI, donde el medio más veloz y desarrollado de transmisión de datos era la carta, no son los conceptos que hoy sirven para leer la caricatura como objetivaciones semióticas. Por lo tanto esta investigación en comunicación teórica, se propone, a partir de la investigación realizada en la Maestría en comunicación educativa, de la Universidad Tecnológica de Pereira: afinar y complementar la taxonomía del nuevo paradigma de la caricatura. Paradigma que ahora avanza a la comprensión de la risa como totalidad y demanda la revisión clásica de conceptos como humor, humorismo y caricatura, desde la perspectiva de este modelo general de indagación.